Al
menos el 14% de los niños menores de cinco años sufre un episodio
de diarrea al año y los de estreñimiento y dolor abdominal
representan el 25% de las consultas pediátricas.
El
actual ritmo de vida ajetreado, la falta de tiempo para cocinar y el
consumo habitual de comidas preparadas afectan al aparato digestivo. A lo
que también se le atribuye la situación emocional por
lo que este pasando el individuo.
El Día
Mundial de la Salud Digestiva, centrado este año en las infecciones
intestinales, pretende concienciar de la importancia de "adoptar hábitos
adecuados desde la infancia con el objetivo de prevenir diferentes
patologías", por lo que los expertos llaman a cuidar la higiene
en el hogar (lavarse las manos al manipular alimentos, tener limpios los
utensilios de cocina) o evitar los riesgos que puede acarrear el consumo de
alimentos crudos como huevos y carnes.
Las conductas inadecuadas en la infancia tiene sin duda repercusión en edades posteriores de la vida" se debe concienciar a los padres y niños como es el aparato digestivo, cómo funciona y cómo protegerlo, con un decálogo de recomendaciones entre las que se encuentran cuidar la alimentación (incluir suficiente fibra, frutas y verduras en la dieta), beber agua, respetar los horarios de las comidas, ir al baño a la misma hora y sin prisas, y hacer ejercicio físico.
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